miércoles, 30 de octubre de 2013

Especial Halloween: La dieta de los zombies (o infectados)


Desde el principio he estado hablando de que mi intención es cambiar a una vida llena de hábitos sanos, longevidad, un peso adecuado, buena forma física... Me sorprende no haber llegado antes a esa conclusión, porque lo que busco es tener la salud de un zombi. Más allá de la discusión de si un infectado no es un zombi, y viceversa, hay que tener en cuenta que los zombies:
- Viven mucho, tienen una longevidad envidiable.
- No envejecen.
- En muy rara ocasión verás zombies gordos.
- Sólo les afectan las heridas muy graves o los daños en el sistema nervioso central.
- Son considerablemente más fuertes.
- A menudo también se les podría considerar más rápidos, aunque probablemente haya cuestiones genéticas o de metabolismo, o quizá en la variedad de la dieta, porque en otros muchos casos son sorprendentemente lentos.

Las únicas pegas son la incapacidad de curarse de heridas, los ojos enturbiados y cierta limitación intelectual (aunque los estudios no son todavía concluyentes en ese aspecto). ¿Pero por lo demás? Sinceramente, el estado zombi es totalmente natural en el ser humano, y parte del hecho de que, como no-muertos, seríamos capaces de evolucionar hasta un estado físicamente superior.

¿No estáis cansados de oír hablar de las virtudes de la dieta Dukan, la de la alcachofa, la paleodieta o la disociada? Probad con la dieta del zombie. No hay dieta más sana y se compone de todo lo que el ser humano necesita, porque ¿dónde encontrar las vitaminas y minerales que necesita el ser humano si no es en nuestros congéneres? Se compone de dos grupos de alimentos principales:
- Cerebros, altos en grasas saludables
- Vísceras, altas en proteínas y todos los micronutrientes que el ser humano necesita (no en vano, son seres humanos, ¿no?)

A poder ser, recomiendo que consumáis seres humanos frescos de cultivo biológico para tener un buen equilibrio entre grasas omega-3 y omega-6 (no os recomiendo que compréis las vísceras directamente en el supermercado, igual se trata de carne de un vegetariano y ya la habréis liado) y preferiblemente que sean matados por vosotros mismos, no querréis ser unos zombies carroñeros. De hecho no hay nada más sabroso y sano que el primer mordisco a un corazón humano todavía latiente. Como veis se trata de una dieta alta en proteínas y grasas (los cerebros constan de un 70% de grasa), y muy baja en hidratos, así que realizadla con supervisión médica para estar monitorizados en caso de fallo hepático o renal. Nota importante: Recordad que no os tenéis que comer a vuestro médico, la salud por encima de todo.

1 comentario :