Lo bueno que tienen los pasteles salados, es que están buenos tanto fríos como calientes, y son excelentes para los que, como yo, nos llevamos casi cada día la comida de casa al trabajo para comer a mediodía, porque no pierden sabor al recalentarse.
INGREDIENTES:
Tabla calórica y de puntos de la dieta WW (Weight Watchers):
pastel de espinacas
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Calorías
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Grasa
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Fibra
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Puntos WW
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queso rayado 50gr
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100
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15
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2
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nata light
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150
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8
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0
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200gr hojaldre
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700
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42
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8
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3 quesitos
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75
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5
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espinacas 500grs
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225
|
0
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13
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mantequilla 1cd
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75
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6
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4 huevos
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300
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TOTAL
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1625
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76
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23
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33
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TOTAL por persona
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406,25
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19
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5,75
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8
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- Sal
- Pimienta
- Otras especias. Yo le he echado menta fresca que tengo en mi mini-jardín de casa, pero por ejemplo la albahaca le sentaría bien, o incluso un poco de nuez moscada le daría cierto toque aromático.
- Opcionalmente le podéis echar piñones, yo no lo he hecho porque no tengo en casa. Pero ojo, porque es bastante calórico.
- También la mantequilla es opcional, y así os podríais ahorrar unas pocas calorías.
- El queso rayado que le echo es uno de la zona de sabor bastante fuerte. Se lo echo porque el queso es un poco mi perdición y así me voy quitando el mono. Podéis decidirle no echarle, echarle alguno más ligero en calorías o lo que os parezca. Lo bueno de los pasteles de verduras es que admiten muchísimas variaciones.
PROCEDIMIENTO:
En primer lugar, hay que quitar el hojaldre y dejarlo para que se ponga a temperatura ambiente durante unos 15 minutos. Luego extender sobre una base y pinchar con un tenedor.
En una sartén, introducir las espinacas en una sartén y tapar para que se cuezan con la calor sin necesidad de echarle aceite. Una vez todas las hojas de espinacas hayan perdido consistencia (o se haya descongelado, si es que como yo utilizáis espinacas ultracongeladas) le echáis la nata y lo salpimentáis al gusto. Cuando la nata empiece a coger calor, cuando emita vapor, le echáis los tres quesitos y vais removiendo hasta que se fundan.
Una vez hecho todo, batís a conciencia los cuatro huevos en una fuente grande y le echáis la mezcla tibia dentro del huevo y añadís los 50g de queso rayado (el que yo he usado es uno de por la zona donde vivo, Savoya francesa, pero cualquier queso con un gusto fuerte le irá bien) y la leche desnatada hasta que la mezcla tenga un color entre blanco y verdoso. Lo echáis todo dentro del molde con el hojaldre y trenzáis los bordes para ajustar la altura del hojaldre. Como veis yo no tengo mucho arte haciéndolo.
Lo horneáis a 200 grados hasta que esté el centro cuajado y el borde tostadito, ¡y ya está! Las porciones son de un cuarto, o podéis comeros un octavo y acompañarlo con lo que sea. Yo al fin y al cabo soy un chico bastante grande y para mí una dieta de 1500-1700kcal ya me resulta hipocalórica. Cada porción son unas 400kcal o el equivalente a 8 puntos de dieta WW.